Cuesta entender lo difícil que les resulta a algunas personas escuchar la realidad. Al menos la realidad de los vulnerables, esos ciudadanos que -empobrecidos- buscan un espacio para la esperanza, un hombro para el consuelo y una mano que les ayude a saciar el hambre.
Algunos están en la luna, pensando que la crisis es un problema monetario cuyas consecuencias no se reflejan en los rostros de tantos vecinos. Otros están en la luna pensando que junto a ella, habita el dios en quien dicen profesar fe.
Cuando desde la oscuridad de este mundo, con sus miserias y pobrezas, somos capaces de andar en busca de la justicia, la solidaridad !!!curioso¡¡ la luna ilumina, alienta, satisface la mirada.
¿En qué luna andas colgado?
14 kilómetros marcan la distancia entre la exclusión y la inclusión. Esa distancia separa la Puerta del Sol, punto neurálgico de Madrid, de la Cañada Real Galiana. 14 kilómetros separan la costa europea de un continente empobrecido. Catorce kilómetros: una distancia muy larga para quienes se ven obligados a recorrerla cada día. Con este blog pretendo visibilizar y rendir homenaje a todas esas personas que peregrinan cada día por los márgenes de la exclusión.
Me encantó verte!! y como siempre con cámara en mano y dispuesto a reivindicar las injusticias!!
ResponderEliminarNatalia.
Me encantó verte!! como siempre con cámara en mano y dispuesto a reivindicar las injusticias a tu paso!!
ResponderEliminarNatalia