Acabo de llegar de la calurosa y turística plaza de Jacinto Benavente, en Madrid, junto a la puerta del nuevo registro del Ministerio de Justicia. Aquí llevan viviendo 35 días la parte dolorosa de una familia que hace 20 años, al someterse el hijo Antonio a una cirugía plástica de la nariz quedó, posiblemente por un fallo médico, en "coma vigil irreversible".
Desde entonces sus padres han permanecido, tan quietos como el hijo en la cama, junto a su inmóvil vástago moviéndose únicamente con el fin de solicitar Justicia en un país, dice una cansada madre Juana, que pensaba la ejercía.
Si bien el primer Juez les dio la razón e intentó mitigar semejante dolor condenando a las aseguradoras de los médicos y la clínica; estos, sabiendo de triquiñuelas jurídicas y desalmados del todo, recurrieron y se encuentran con una justicia que donde dijo una cosa, después dice su contrario.
Como bien explica Juana, con los mismos documentos un Juez ve una cosa y otros la contraria. ¿No habrá que inhabilitar al primer Juez que les dio razón? En fin, siguen luchando por lo que entienden es suyo llegando al Tribunal de Estrasburgo. Este magno tribunal ni siquiera les recibe poniendo fin -por el momento- a su lucha judicial y confirmando la sentencia del Tribunal Supremo Español que se despachó con una condena de 400.000€ (sí, si habéis leído bien: cuatrocientos mil Euros) a dicha familia.
Los monstruos de las Aseguradoras pueden más que la razón de las víctimas. En este caso Antonio y sus aguerridos padres.
La madre comenta que nadie "de los importantes" ha pasado por su nueva casa. Pero que sí se ha visto muy visitada por gentes anónimas que muestran su perplejidad y consternación al encontrarse, en medio de este Madrid veraniego, a un joven de 41 años tendido en un colchón, dentro de una tienda de campaña.
Como siempre, así lo dice Juana, asalta el milagro de la fraternidad: el quiosquero del puesto de periódicos les cede un cable para la luz. Pero claro, este obrero de la camaradería marcha de vacaciones. Ella, cuenta orgullosa, ya ha presentado una solicitud al Ayuntamiento de Madrid para que autoricen el enganche a una farola. Pero, ya les adelantan, lo ven difícil porque las farolas llevan energía de "bien público".
En estos momentos esta es una grave angustia: Antonio, su hijo vegetal hace 20 años, tiene difícil su permanencia ahí si no consiguen corriente para alimentar el pequeño ventilador que suaviza las calurosas horas a las puertas del Organismo Público.
No piden nada. Están a la espera de nueva documentación que otro obrero del compañerismo -esta vez letrado- anda reuniendo para volver a insistir ante los tribunales de ¿Justicia? que a Antonio una mala praxis médica dejó en coma vigil irrversible hace 20 años.
14 kilómetros marcan la distancia entre la exclusión y la inclusión. Esa distancia separa la Puerta del Sol, punto neurálgico de Madrid, de la Cañada Real Galiana. 14 kilómetros separan la costa europea de un continente empobrecido. Catorce kilómetros: una distancia muy larga para quienes se ven obligados a recorrerla cada día. Con este blog pretendo visibilizar y rendir homenaje a todas esas personas que peregrinan cada día por los márgenes de la exclusión.
Ocurre que un error médico rompe la vida de una persona. Lo vemos algunas veces, aunque es humano equivocarse. Pero la Administracion de Justicia debe estar ahí para paliar lo que ya no podemos evitar. La administración de Justicia no puede ser una LOTERIA. Nunca sabes cómo va a ser la sentencia porque, como dice esta madre, con las mismas pruebas cada Juez puede estimar algo diferente. Y hay casos que no pueden depender de puntos de vista, de hipótesis especulativas. Aqui es cuestión de devolvera Antonio, ya que no se puede la salud, al menos la dignidad de hombre enfermo.
ResponderEliminar¿Por qué en una sociedad organizada por seres considerados inteligentes, cuando se produce una desgracia, en vez de procurar enmendarla, se ahonda mas en la injusticia, se acumula un despropósito tras otro? ¿Por qué la implacable maquina de la burocracia de las diversas instituciones sigue actuando indiferente al dolor de una madre (tremendo cuando es por un hijo) y desinteresada de la suerte de sus componentes? ¿Siempre es y será mas importante la cifra de negocio que los sentimientos? y sobre todo ¿Por qué lo consentimos?
Juana la madre de Antonio esta contenta por su visita Javier Baeza lo dice a todas las personas allegadas que se han acercado los de la iglesia roja de Vallecas, la estamos animando a que un domingo venga y se acerque por Vallecas pero por ahora no se separa de aqui.No queremos que sus fuerzas decaigan especialmente este mes de Agosto esperando que
ResponderEliminarquiza en Setiembre haya novedades, a veces tiene bajones por eso le agradecemos de todo corazon que si esta en Madrid pase usted o sus
allegados a intercambiar unas palabras cuando
quieran, por la tarde cuando baja el calor y
que este Agosto sea mas llevadero